Su formación proviene del ámbito de la gestión, aunque lo que realmente la define es su búsqueda constante de belleza y verdad. No aquella ligada a un canon estético determinado, sino la que podemos encontrar en cualquier lugar y momento. «Un encuentro, una buena conversación… si algo es de verdad, está lleno de belleza».
Como la de la casa de Urbidermis en Belloch, donde nos recibe Julia para hablar de urbanismo, diseño, pasado, futuro y polémicas que, en realidad, no lo son tanto. Una casa que siente como suya desde hace ya más de ocho años. Una casa desde la que esta marca líder en el sector produce iluminación, mobiliario urbano y microarquitectura para impulsar ciudades más inclusivas, conectadas, eficientes y limpias.